Diego eterno, Diego en presente, Diego para siempre

Ayer el fallecimiento de Diego Maradona estremeció al mundo y luego de una larga jornada de despedida va camino a su descanso en Jardín Bella Vista

Cerca de las 13 horas de miércoles 25 de noviembre una fuerte preocupación comenzó a circular: falleció “El Diego”, entre dudas y miedos se confirmó que luego de una descompensación falleció. Y allí comenzó un día de asombro, dolor y despedida.

Todo comenzó a las 11:30 horas del miércoles en una casa del Barrio San Andrés de Nordelta, cuando su psicólogo y psiquiatra personal notaron que no reaccionaba e intentaron reanimarlo, pero sin éxito. Se encontraba en esa vivienda cursando su recuperación de una operación de la cabeza y de las adicciones, según se había anunciado recibiría atención domiciliara para asegurar su recuperación. Lo primero que trascendió fue que la causa de muerte fue un caro cardiorespiratorio.

Dado que falleció en su domicilio y por acción judicial se le realizó una biopsia en la morgue de San Fernando, la que arrojó que murió debido a «una insuficiencia cardíaca aguda, en un paciente con una miocardiopatía dilatada, insuficiencia cardíaca congestiva crónica que generó un edema agudo de pulmón».

La causa quedó en manos de Fiscalía de San Isidro.

A penas se conoció lo ocurrido las despedidas comenzaron a hacerse sentir a lo largo y ancho del mundo, los que salieron a la calle se reunieron espontáneamente en lugares claves y sentidos: su casa en Fiorito, Habana y Segurola, Obelisco, Canchas de Boca, de Argentino Juniors y Club de Gimnasia y Esgrima La Plata, Plaza de Mayo y Morgue de San Fernando.

El último adiós se realizó en Casa Rosadas desde las 00 del jueves para familiares y amigos en un velorio intimo para luego, ya a cajón cerrado, se abrieron las puertas para que los miles de fanáticos lo saluden.

En un momento se programó que el velatorio hasta las 16 horas con el ingreso de los hinchas, pero cerca de las 14 horas comenzaron disturbios en zonas aledañas a Casa Rosada, por lo que el velorio se suspendió.

Al momento de los disturbios se traslado el féretro a otro salón y se comenzaron a barajar opciones para continuar… pero las puertas se cerraron y los hinchas, sin respuestas, permanecieron en el lugar.

Luego de más de tres horas de corridas, heridos, balas, disturbios y un velatorio intimo y privado se decidió finalizar el velatorio y comenzar el traslado por tierra del ídolo argentino.

Minutos antes de las 17 horas arribó al lugar la carroza fúnabre y poco a poco se comenzó a anunciar la salida del Cortejo fúnebre con destino el Jardín Bella Vista. Un viaje que demoró por la distancia pero fue un momento único y muy emotivo por el gran acompañamiento de los hinchas que se agolparon la ruta para verlo pasar y decirle… ¡Adios!.

Fue una jornada de muchos hechos, de intensidad y calma, de pasión y amores, reflejo de la vida de Diego Maradona…

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