Detrás de un sonido hay muchas historias, mucha pasión. Todo a veces empieza con un volantazo, y esto nos cuenta el Doctor y músico, Adrián Herrera.
Adrián nos recibe como buen anfitrión, con una cerveza bien fría, sanguchitos, distendidos comenzamos la charla. Siento un respeto total, al mirar las puertas de su estudio, algo tan íntimo y sagrado realizado con su ingenio.
Su compañera de vida Mariela, con una hermosa sonrisa me saluda… entre risas: “¿Qué te enamoró y te enamora de Adrián?, su respuesta tímida: “¡Todo!”. Ella con mucho amor lo describe como muy inteligente, y cuenta, “nos conocimos en el primer año de facultad, cursaba Psicología, luego me cambié de carrera, no era lo mío, me dedico a las letras, pero desde ese día me enamoré y de allí estamos juntos”
Adrián, reclinado de espaldas al jardín, responde: “Desde el 2000 que estamos juntos”.
El amor de una pareja tan joven nos conmueve, será el arte, la vida. Adrián, es un ser de luz, es un genio con un corazón enorme. ¡Qué más! Con un brindis, comenzamos esta charla.

1- ¿Cuál fue tu lugar de nacimiento?, ¿Qué recordás de tus primeros años?
Yo nací en Mendoza, en el Barrio Trapiche de Godoy Cruz. Vengo de una familia tradicional, católica, trabajadora, compuesta por 5 integrantes, siendo el menor de tres hermanos.
Recuerdo desde chico haber sufrido mucho la ausencia de mi padre, a quien prácticamente no veía por la gran cantidad de horas que él trabajaba. Después de muchos años comprendí que esa ausencia no se debía a una falta de interés, de afecto, sino todo lo contrario, entendí el concepto de sacrificio por las personas que uno ama. Comprendí que cada gota de sudor de mi padre tenía como objetivo brindarnos una buena educación y sembrar el camino de una vida con valores. Él era una persona seria, poco demostrativa, muy responsable y abocado a su trabajo.
Creo que cuando uno crece y madura ciertos aspectos, o incluso cuando uno mismo se convierte en padre, termina de comprender y valorar todo lo que hicieron por uno. Hoy puedo decir que tuve el mejor padre, de él aprendí tantas cosas, tantos valores: la honestidad, el esfuerzo, la responsabilidad, el detallismo, el amor al trabajo y el ideal de perfección en cada cosa que uno haga.
Con el pasar del tiempo experimenté un cambio en mi forma de ser y comprendí que tenía que aceptarlo como era, con sus defectos y virtudes; y nuestra relación comenzó a florecer. Tuvimos varios años un vínculo muy estrecho, aprendí a disfrutarlo, comprenderlo, y conocí una persona extraordinaria.
Tuve la suerte de abrir los ojos a tiempo y poder disfrutarlo y vivirlo al menos unos cuantos años, antes de que tuviera que partir hacia un lugar mejor. Tuvimos quizás muy pocos abrazos, pero fueron tan emotivos que significaron los mejores abrazos de mi vida.
No hay día que no lo recuerdo y extrañe. Siempre está presente, tan presente que inclusive estoy grabando en el estudio una interpretación del tema «Tears in Heaven» de Eric Clapton. Un tema que lo he escuchado mil veces pero que todavía me emociona muchísimo.
Tenía la idea de hacer la canción instrumental, con guitarras, bajo y percusión, pero durante el periodo de grabación de esa canción, Carla Astié pasó a grabar sus canciones por High Pass Studio y le propuse interpretar las voces. Imagínate para mí, es un honor poder compartir algo de música con una artista de ese nivel y que tan humildemente haya aceptado formar parte de esa interpretación dedicada a mi padre me emociona mucho. Si bien aún no se ha terminado de mezclar la canción, sólo puedo adelantarte que el próximo mes estará lista.
Volviendo al tema de mi familia, fue mi madre quien se abocó a las necesidades emocionales de nosotros tres, a la ayuda escolar, la contención, el apoyo. Excelente persona, comprensiva, afectuosa, protectora. Tengo la suerte de aún poder abrazarla y decirle lo mucho que la quiero. Con ella siempre tuve una relación muy afectuosa. En pocas palabras, mi madre siempre estuvo y está, uno puede estar pasando por un momento terrible pero siempre está. No hay mejor madre para mí que ella, la adoro con el alma.
2- ¿Cómo fue tu niñez?
Desde chico me consideré una persona muy pasional, emocional y afectuosa. Siempre he expresado mis sentimientos de manera franca y abierta; me dejo afectar por las diferentes personas y acontecimientos que van atravesando mi vida. Acá es donde se plantea una doble vertiente: por un lado, uno sufre muchísimo ciertos acontecimientos de la vida, pero al mismo tiempo las cosas que uno vive, las relaciones con las personas que uno quiere, se viven de manera tan intensa que es una sensación mágica y única; aunque tiene ese lado negativo que uno siempre sale lastimado emocionalmente, las vivencias tienen una intensidad única.
Tengo los mejores recuerdos de mi infancia: juegos entre amigos, partidos de futbol, partidos de ajedrez. Toda mi niñez centrada en mi barrio entre juegos de escondidas, la mancha, el indio. Realmente solo recuerdos hermosos me vienen a la imaginación.
Tengo un hermano sólo 2 años mayor que yo, Gabriel, con quién hemos tenido vivencias únicas. Con él hemos compartido tantas cosas, tantas anécdotas, travesuras, complicidades. Él es quien siempre me ha cuidado, inclusive ahora de grande.
Por otro lado, mi hermano Javier, 6 años mayor que yo. Crecimos quizás en diferentes sintonías, gustos, pensamientos. Con el paso del tiempo esas distancias se fueron acortando y hoy también es como una parte de mí. Si bien no juagamos de chicos, con el tiempo fuimos compartiendo risas, momentos extraordinarios, salidas, asados, vinos. Hemos reído juntos, llorado, nos hemos abrazado.
Daría lo que fuera por mi familia, soy lo que soy gracias a ellos.
3- ¿Cómo nace tu pasión por la música? Tengo conocimiento que amas la guitarra…
Mi pasión con la música nace desde muy chico. Tengo recuerdos e imágenes mentales de discos de mi padre: música clásica, los tres tenores e inclusive discos de tango. Esos eran sus gustos, aunque no vivió la música de una manera pasional.
Por el lado de mi madre, recuerdo que sus gustos eran más variados, adorando las canciones de su época: Palito Ortega, Sandro. Hasta el día de hoy la escucho cantar algunas canciones de aquella época a mis hijas. Sí tengo imágenes mentales de muy pequeño de un tocadisco antiguo en el que rodaba un disco de pasta con la canción de “El extraño de pelo largo” de La joven guardia.
Siempre había música en mi casa, algún disco puesto o incluso algo sonando de la radio a válvulas de mi abuela.
Crecí escuchando Led Zeppelin, Pink Floyd, Queen, Aerosmith, algo de los Beatles, Rock Nacional. Siempre fui muy independiente y con muchas libertades, recuerdo desde chiquito todos los días viernes irme en colectivo solo al centro y pasar grandes cantidades de horas en las disquerías viendo y escuchando cassettes y CDs; cuando cerraba el comercio pasaba por el trabajo de mi padre quien me traía de regreso a mi casa. Época que recuerdo tan vívidamente, aun puedo sentir esa sensación de satisfacción tan plena al entrar a una disquería y ver el lanzamiento de un nuevo disco de alguna banda que adoraba.
Un día escuché el disco Appetite for destruction de Guns N´ Roses y quedé atrapado desde entonces. Me volví muy fanático de ellos y de toda la música rock de los ’80. Quería ser guitarrista y tocar cada uno de esos riffs que escuchaba en las bandas que adoraba. Soñaba ser una estrella de rock, subirme a un escenario y poder compartir algo de lo que uno hace con las personas.
A los 12 años mi madre me ayudó a completar el dinero de mis ahorros para comprarme mi primer guitarra. Inmediatamente empecé a estudiar guitarra con profesor durante muchos años y no dejé de hacerlo hasta el día de hoy. Terminé estudiando de manera alternada entre profesores y de manera autodidacta.
Tuve mi primera banda a los 13 años y mi primera experiencia en vivo a los 14 años, en un boliche de la calle Arístides Villanueva, “Die for you”. Aún conservo el Flier de ese día.
Nunca más pude desprenderme de la guitarra, sólo en dos oportunidades tuve un periodo de estancamiento. La primera fue durante una parte de mi carrera universitaria, por falta de tiempo y dedicación netamente al estudio. Al cabo de dos años volví a tocar y estudiar guitarra. El otro periodo fue durante la enfermedad y muerte de mi padre. Creí tener la sensación de no querer volver a tocar nuevamente, aunque la música seguía resonando en mi interior. Decidí escuchar mi yo interior y comencé a estudiar Audio, Sonido, Grabación, Producción.
Después de 4 años sin tocar ni una cuerda de guitarra me enteré del fallecimiento de Eddie Van Halen, a quien siempre consideré el mejor guitarrista de la historia. Siempre amé sus discos, su forma de tocar, su capacidad innovadora para sacar lo mejor de ese instrumento; fue y seguirá siendo un ídolo para mí. Recuerdo aún una de mis sesiones de psicoanálisis durante mi adolescencia, donde le planteaba a mi analista que tenía que llegar a tocar como EVH, cueste lo que cueste. Obviamente nunca llegué a tocarle ni los talones, aunque tuve la oportunidad de pedirle a un amigo que me trajera una réplica de su guitarra de Estados Unidos.
4- ¿Qué otra profesión ejerciste?, la cual hizo este despliegue en el arte en Mendoza
Siempre tuve una segunda pasión, que incluso me generó mucha incertidumbre a la hora de elegir mi vocación y qué estudiar a los 17 años: la psicología. Siempre ha estado presente en mí la idea de ayudar y aliviar a las personas. Dediqué mucho tiempo de mi vida a formarme como psicólogo tanto en el área laboral como en psicoanálisis. Hoy puedo decir que convivo con ambas profesiones, inclusive, años atrás, he llegado a presentar un trabajo sobre la Música y el Psicoanálisis: cómo los seres humanos nos vemos afectados por la música, incluso desde sociedades primitivas, hasta poder expresar con música aquello que nos vemos imposibilitados de expresar con palabras.
5- ¿Cuáles son tus amores profundos? ¿Esos amores de vida que te acompañan?
Mi amor más profundo es mi familia. Mi mujer y mis dos hijas lo son todo, están en todo, en cada paso que doy las llevo conmigo. Incluso a cada una de ellas les he compuesto y escrito al menos una canción. Por ellas tres doy y recibo todo.
Por otro lado, mis padres y mis hermanos, ellos también me apoyan en cada uno de mis proyectos y decisiones, siempre están presentes.
Mi familia política no puedo dejar de mencionarla, son incondicionales y los adoro.
6- ¿Qué significa la amistad ?; ¿Cuáles han sido tus preferencias al elegir un amigo?
La amistad ocupa un lugar muy importante en mi vida. Tengo dos grandes amigos de la infancia que aún conservo, Marcelo y Bebu. Ellos son como mis hermanos, podemos hablar absolutamente de cualquier cosa de nuestras vidas, somos muy confidentes. Pueden pasar meses sin que nos veamos, pero sabemos que siempre estamos. Mis amigos son mi columna vertebral.
Me considero una persona muy sociable, me gusta conocer gente, simpatizar, conocer sobre sus modos de vida, etc. Eso me ha llevado a conocer gente incluso de otros países que aún mantengo contacto y conversaciones.
La amistad hoy en día es un término muy desvirtuado. Actualmente todo el mundo es amigo de todos, sin considerar muchas veces que un amigo es el que siempre está, no solamente en las buenas.
La amistad para mí implica una especie de compromiso. Hay una preocupación constante por el bienestar del otro, su progreso, su felicidad. Amistad implica un abrazo, un llamado o incluso un simple mensaje cuando sabés que el otro no la está pasando bien. Amistad significa pensar en cómo hacer para que el otro tenga una pequeña cuota de alegría cuando se encuentra triste. Amistad es poner el cuerpo, el hombro, la oreja al otro incluso cuando uno está agotado.
A lo largo de la vida he tenido la suerte de ir encontrando y sumando diferentes personas a la lista de aquellos que considero como amigos. He tenido experiencias muy lindas con gente de diferentes edades, incluso mayores que yo, donde uno encuentra no sólo un apoyo, sino la necesidad de escuchar, comprender, empatizar, compartir e incluso sentir las desdichas del otro y desesperadamente buscar la manera de calmar ese dolor, de simplemente expresar que uno realmente está ahí, para lo que el otro necesite. Una especie de “podés contar conmigo que en lo que pueda voy a estar”.
Sinceramente no tengo preferencia alguna a la hora de elegir un amigo. Las diversas situaciones de la vida me han llevado a encontrar amigos ahí donde uno nunca creía que los iba a encontrar. No es algo premeditado, es algo totalmente espontáneo. La vida va haciendo aparecer personas incluso en los rincones menos pensados, que uno puede terminar forjando una amistad.
Valoro mucho en una amistad la sinceridad, la honestidad, la transparencia y la lealtad. Son valores que sí son fundamentales para mí, porque son valores que yo tengo internalizados. Una persona desleal, sin códigos, que no es honesta no posee las cualidades para incluirla en mi concepto de amistad; quizás porque yo siempre me muestro de esa manera.
7- ¿Tienes algún proyecto en mente el cual todavía es inédito?
Proyectos en mente siempre tengo. Siempre mi cabeza está pensando en qué hacer, en qué poder profundizar. Hoy podés verme pintando o mejorando mi estudio de grabación, mañana soldando algún cable para el estudio o diseñando algo para realizar o incluso experimentando con algún plugin. Siempre intento mantenerme ocupado, estudiando algo o perfeccionándome en algo.
Actualmente estoy estudiando para desarrollar habilidades en la parte de video y cada día leo o estudio en relación al audio y al sonido también. El mundo del arte es un universo infinito.
También me gusta mucho estudiar cosas de guitarra. Generalmente es lo que realizo en mis tiempos libres. Tocar la guitarra es mi recreo entre trabajo y trabajo. Me permite despejar la mente y liberar todo tipo de tensiones.
Incluso cuando tengo exceso de trabajo durante varios días, el cuerpo mismo es el que me reclama hacer algo de música, volver a contactarme con mi alma para generar nuevas fuerzas.
8- ¿Cuáles son los artistas en la música que te elevan dejando tu mente en libertad?
Muchos son los artistas que logran conmoverme. Hay canciones que puedo escuchar a lo largo de los años sin cansarme. Hay melodías que, a pesar de escucharlas infinidad de veces, descubro algo nuevo cada vez que pongo “PLAY”. Es algo raro, como si uno escuchara algo nuevo de una canción cada vez que la escucha.
Soy una persona muy apegada al Rock y Heavy Metal de los 80’. Si bien mi repertorio musical de escucha es muy variado, siempre termino volviendo a los 80’, una especie de círculo vicioso.
Hace ya varios años que escucho cualquier tipo de música, desde rock hasta música clásica, pasando por pop, blues, jazz, etc.
Cuando escucho una música que a mi modo de ver es interesante, no sólo escucho la composición musical. Intento descifrar que hay detrás de esa música, cuál es el significado o lo que pretende transmitir.
Detrás de cada música u obra de arte hay mucho trabajo previo de producción que intenta direccionar dicha música a un puerto, hay muchas cosas interesantes por averiguar y aprender que no están a la vista.
En producción musical nada es al azar, desde la escala musical de una canción, el ambiente que genera, los climas, cambios de tonalidades e incluso, la ambiencia, todo está pensado y encuadrado con el fin de que esa canción porte un mensaje.
Me fascina escuchar música con auriculares o algún sistema que permita una clara delimitación de los paneos, la profundidad otorgada a cada instrumento, la voz, etc.
Pink Floyd es una de esas bandas que intento escuchar con un buen sistema de sonido, creo poder tocar el cielo con las manos cuando lo hago.
9- Si tuvieras que semejante algún elemento de la naturaleza, ¿Cuál te identifica?
Sinceramente nunca lo pensé, pero quizás sea un buen momento para hacerlo. Quizás sea el fuego. Soy una persona muy pasional, en todo sentido. Puedo ser muy pasional a la hora de tocar mi guitarra, de mezclar en el estudio, de amar una persona o inclusive para llevar a cabo mi trabajo.
Pasión para mí significa dar todo de mí. Intento dejar todo en lo que hago siempre. Me considero una persona muy autoexigente a la que no le gustan las medias tintas.
Soy poco conformista y busco la perfección aún sabiendo que no la hay. Siempre necesito estar al menos un 99% seguro de que lo realizado se encuentra en condiciones, para ello empleo muchas horas de esfuerzo y estudio. Por ese motivo logro disfrutar sólo cuando he terminado.
Generalmente en el estudio paso muchas horas buscando lo que no funciona, lo que no suena bien. Paso más horas buscando el defecto, el detalle.
Es un camino muy espinoso, pero la satisfacción final realmente lo vale.
10- ¿Jugas con los acordes en tu intimidad?
Soy una persona bastante tímida. No me considero alguien que forma parte del centro de la escena. Incluso cuando tocaba la guitarra en algún lugar público siempre pasaba nervios, no lograba disfrutar al 100%. No me considero una persona muy desenvuelta en un público donde sea el foco de miradas.
En la intimidad juego mucho con los acordes. Me encanta componer, buscar sonidos, estudiar una canción en profundidad e intentar transmitir algo con cada acorde que uno decide colocar en la composición.
11- ¿Qué es para Adrián Herrera ser el creador de un estudio de grabación en Mendoza?
Ser el creador de un estudio de grabación es un sueño hecho realidad. Al mismo tiempo, es algo que se fue gestando y madurando con el tiempo.
En primera instancia lo que hoy es un estudio de grabación, anteriormente, era un proyecto de sala de ensayo propia. Yo tocaba en una banda de hard rock desde hacía años, con la que siempre soñé concretar algún proyecto sólido. Comencé a crear el espacio, acustizar el lugar de la manera que yo consideraba correcto, sin conocimiento alguno.
Por diversas situaciones y golpes personales de la vida, de un día para el otro me alejé de la guitarra. Al cabo de cierto tiempo sentía ese empuje interior que me llamaba a volver a la música. Decidí volver, pero desde otro lugar.
Comencé a pensar en ampliar mis conocimientos técnicos al ámbito del audio y el sonido. Ingresé a estudiar al Instituto Mendocino de Audio y Sonido (IMAS) la carrera de Especialista en Audio y Sonido. Tuve esa suerte de la vida de conocer a quien inclusive hoy es una de las personas referentes en el tema, una persona reconocida en el ámbito nacional e internacional, el Ing. Miguel Gantuz. Una persona extremadamente especial, sincera, llena de conocimientos y con una humildad tan grande de la que aprendí infinidad de cosas. Concurría a todas las clases, e inclusive semanalmente a todas las horas de consulta, quería aprender todo de él, desde matemática, física, psicoacústica, etc. para comprender un poco más del fenómeno del audio y del sonido.
Siempre me repetía la frase “vos querés capitalizar el conocimiento”, en relación al intento de aprender y aprovechar al máximo de alguien tan experimentado como él.
Forjamos una muy linda amistad, solemos llamarnos para saber cómo se encuentra cada uno y conversar un largo rato. Tuve la oportunidad de tenerlo en el estudio grabando folklore con un muy amigo suyo, obteniendo sesiones impresionantes. Siempre que realizo un trabajo en el estudio el termina siendo el juez que determina el veredicto, realizando devoluciones totalmente constructivas.
Mi último trabajo en el estudio con Carla Astié se lo envié para pedirle una opinión profesional, obteniendo una devolución más que favorable. Me llena de orgullo haber estado a la altura de una artista tan profesional y comprometida como Carla, y haber realizado adquirido las herramientas necesarias, en el IMAS, para realizar un buen trabajo.
Cuando finalicé, decidí estudiar para Especialista en Ingeniería de Grabación conociendo profesores altamente capacitados, y excelentes personas, de quienes pude adquirir innumerables conocimientos técnicos de la materia.
A esas alturas, el proyecto de sala de ensayo ya era algo obsoleto y comencé a pensar en construir mi propio estudio de grabación.
Trabajé en ello con el Ing. Adriano Sabéz Frissón, profesor del IMAS, distinguido por realizar su título de posgrado en Europa, quien realizó todas las mediciones acústicas del recinto y diseñó los tratamientos a realizar en el lugar.
Como mencioné anteriormente, es un sueño cumplido. Comencé a construirlo en el año 2012 y finalicé recién en el año 2018. Fue un gran esfuerzo. Todo lo que encontrés en el estudio fue realizado por mí, pintura, atornillado, soldadura, resonadores, difusores, cableado eléctrico, colocación y cableado de luces, cableado de audio, etc.
Estoy totalmente feliz de que tanto esfuerzo hoy tenga sus frutos.

12- ¿Qué te llena el alma cuando escuchas un artista cantar en tu estudio y luego lo editas?
Con el tiempo me he dado cuenta que, así como es fundamental que el artista sienta en el alma la canción que ejecuta, quién lleva a cabo el proceso de edición, mezcla y masterización se encentre en la misma sintonía.
Si bien me ha pasado en trabajos anteriores, con Carla fue algo especial. Ambos sabíamos el camino a donde queríamos llegar, pensábamos de la misma manera sobre lo que queríamos lograr con su canción. Fue algo grandioso, manejar los mismos conceptos, las mismas ideas, los mismos objetivos.
Creo que su trabajo fue brillante porque cantó con el alma, y el trabajo de mezcla quedó bien porque mezclé con el alma.
He descubierto que a la hora de mezclar una canción que alguien cantó con verdadero sentimiento, eso está totalmente presente en los procesos posteriores. Pude sentir la pasión de Carla por la música e intenté seguir en esa misma dirección.
13- ¿Cuáles son tus sueños? Ya que menciono «sueños»… ¿Significó en tu vida Lennon algo para vos?
Mis sueños no incluyen grandezas, riquezas ni grandes reconocimientos. Solo espero poder llevar a cabo algo que realmente me apasiona. No hay nada más grato que hacer lo que uno ama.
Estoy convencido que alguien que compone o interpreta música con y desde el alma, con pasión, es alguien capaz de influir en quien lo escucha, en quien recepciona su mensaje. Trabajar en esa dirección es mi objetivo. Intentar influir y dejar una marca en quien escucha el trabajo de uno ya es un sueño cumplido.
Lennon… qué decir… sin palabras… un maestro. Tiene composiciones realmente espectaculares, musicalmente hablando. Siento cada una de sus letras. Una persona única, un luchador de la paz. Un ser de luz.
14- ¿Crees en un mundo de paz? ¿Qué es para vos el estado de paz?
Absolutamente creo en un mundo de paz. Obvio que es un trabajo en conjunto, pero creo que con esfuerzo de todos puede lograrse, sólo hay que creerlo y llevarlo a cabo.
En la actualidad cada vez vemos más desintegrado este concepto. Se ve más agresividad que paz. La paz implica empatía, ponerse en el lugar del otro, vivenciar los sentimientos que se encuentra atravesando el otro y comprenderlo.
Creo que todo estado de paz parte en primer lugar de un estado de conformidad y paz interior. Uno no puede estar en paz con el otro si no está en paz con uno mismo.
Sería hermoso ser parte de un mundo donde “todas las personas vivan en paz” como dice Lennon en Imagine. Pero el ser humano tiene ya el instinto de autodestrucción. Qué más paradójico que Lennon, un precursor y símbolo de lucha por la paz, muera asesinado en el 80.
Vivimos en un mundo de egoísmo donde el concepto de paz se encuentra cada vez más difuso.
15- La cordialidad y tu empatía te caracterizan…, ¿Qué enamora a Adrián Herrera de las personas?
El amor… que concepto más complejo. Parto de la base de que considero que existen muchos tipos de amores. El amor filial, el fraternal, conyugal, el amor por los lasos de amistad, el amor propio, etc.
El amor para mí siempre implica la entrega. Darse por completo al otro. Estar ahí para un hijo, un cónyuge, un amigo, un hermano, etc. cuando este más lo necesita.
Es pensar en el otro, en lo que necesita, en sus sentimientos, en su estado emocional, si se encuentra bien o mal, etc. Lo importante del amor no tiene que ver con cómo se genera, sino en cómo se preserva, cómo se mantiene.
El estado de enamoramiento que caracteriza cualquier tipo de relación, es solo momentáneo. No existe el amor y felicidad absoluta más que por momentos fugaces. Ello porque siempre se hacen presentes las diferencias con el otro. En la pareja, en las amistades, con los hijos, siempre aparecen aspectos que nada tienen que ver con el estado de enamoramiento absoluto, sino más bien con las diferencias. Ahí es donde toda relación entra en crisis: donde un hijo ya no es aquel ideal que uno creía que era, donde la pareja ya no es tan perfecta como uno creía, donde se evidencia que un amigo quizás no está cuando uno lo necesite.
Entonces ¿qué es el amor? El amor es aceptar justamente esas diferencias del otro. El amor no corresponde a ese momento donde todo marcha bien. Amor no es pretender cambiar al otro a imagen o gusto propio, sino tolerar las diferencias del otro e incluso enamorarse de ellas.
16- ¿Cuál sería tu mensaje a los jóvenes que desean grabar y sueñan ser músicos?
El sueño de todo músico es llegar al corazón de alguien, transmitir algo de lo que hace y que eso tenga un impacto en el oyente. Va más allá de todo reconocimiento o remuneración económica.
Personalmente creo que el hecho de plasmar en un formato, en este caso digital, una canción o una composición es algo fascinante.
Con el avance actual de la tecnología hay infinidad de maneras y herramientas para plasmar lo que uno compone o ejecuta a nivel musical, no necesariamente se requiere de un estudio de grabación para llegar a tal fin.
El mensaje que podría transmitir, que no solo se refiere a lo musical, es la continuidad. Está demostrado que el arte tiene grandes impactos en la emocionalidad de las personas. El arte permite transmitir los aspectos más íntimos que muchas veces incluso no tiene palabras. El arte es una modalidad de expresión del alma con propiedades curativas que permite abordar incluso los aspectos más oscuros de nuestro ser. Esos aspectos más temidos o angustiados pueden ser canalizados a través del arte.

17- ¿Cuál es el pensador o filósofo que te identifica?
Muchos. Me gusta mucho la filosofía, considero que permite cuestionarse muchas cosas que están establecidas y al menos dudar de lo que uno constantemente repite creyendo que es una verdad.
Si tuviera que elegir, escogería a Sigmund Freud. Lo considero un pensador extraordinario, capaz incluso de plantear ideas tan innovadoras y oscuras para la época, al punto de ser perseguido y considerado como un pensador de la sospecha.
He estudiado y profundizado durante muchos años su teoría, ya que es la línea de trabajo que he elegido para desempeñarme en mi trabajo.
Considero que pudo poner palabras a tantos fenómenos y funcionamientos mentales como nadie puedo hacerlo. Marcó un antes y un después.
Aborda temáticas muy interesantes y aplicables incluso en la actualidad: la muerte, la angustia, el amor, la sexualidad, etc.
18- ¿Qué te parece el arte de Mendoza en esta época donde todos nos reinventamos?
Considero que el arte siempre ha sido un camino bastante golpeado y poco valorado. He tenido la oportunidad de conocer muchos artistas con habilidades artistas realmente asombrosas, fuera de lo común, extraordinarios; no sólo en el ámbito de la música.
El arte es una invención: consiste en plasmar algo interno y exteriorizarlo en una canción, en una escultura, en una pintura, etc. Es crear algo ahí donde nada había. Si bien tiene un rédito personal de satisfacción para quien lo lleva a cabo, también considero que es un trabajo arduo, demoroso y complejo. Un artista no realiza su trabajo de la noche a la mañana, le implica un marcado esfuerzo para realizarlo. Por ese motivo es que es tan lamentable la poca valoración y reconocimiento que se le da a nivel social.
Da lástima ver tantos artistas mendocinos con talentos sobrenaturales, bandas de músicos mendocinos que tienen canciones con un nivel de elaboración tan profesional que sólo queden en el under mendocino.
Considero que a nivel cultural poco espacio se le ha dado al artista, más aún en esta situación de pandemia, donde no sólo el aislamiento los ha afectado para desempeñar su trabajo, sino también las repercusiones económicas nacionales que han afectado el bolsillo de todos.
Sería importante que desde el área de Cultura de la Provincia de Mendoza se intentara fomentar el arte creando mayores espacios a tales fines, destinando mayor presupuesto. Actualmente hay muchas personas que aún siguen considerando al arte como algo innecesario o un gasto público que habría que prescindir. Sería importante que pudiéramos realizar un cambio de paradigma que permita una inclusión total del artista. Da mucha impotencia ver que un artista tenga que pagar o alquilar un lugar, con dinero propio, para brindar un espectáculo o para mostrar a la gente su obra de arte.
20- Nos encantaría que nos dejarás una letra de tu autoría en este día donde la música es el impulso hacia la sanación, hacia el crecimiento donde se funden, letras, sonidos, matemáticas. creatividad… colores, sabores, experiencias, ¡Vida!
Voy a compartir con vos Silvia, la letra de una canción que escribí a los pocos días de enterarme que iba a ser padre de mi primera hija. Es una de las canciones más importantes para mí, por el significado que conlleva.
Hoy puedo mirar hacia atrás y entender que esta canción que compuse para Valentina es la expresión de sentimientos que atravesaba en ese momento.
Ser padre fue sin duda la mejor noticia que pude recibir, pero al mismo tiempo me sentía abrumado por los temores lógicos cuando uno se enfrenta a algo desconocido. Esa mezcla de felicidad con miedo al porvenir, cuestionamientos relacionados a si podría ser un buen padre, ese sentimiento de impotencia al pensar que la vida misma conlleva sufrimiento y no querer que un ser tan puro, aun diminuto (huésped sin sombra) tenga que transitar inevitablemente por ese camino.
Un hijo lo cambia todo. Esta letra también deja entrever el anhelo de que quizás, en un futuro, ella decida dedicar su vida o parte de ella al arte, y compartir esta experiencia conjunta en una canción, una letra, un papel.
MI VALENTÍA
Eres todo lo que siempre pedía
Lo que mi alma vacía quería encontrar.
Entre suaves suspiros y oscuros temores,
Estoy comenzando a tejer mi historia.
Que encierra, narra y desarma… mi mundo.
Y en ese vientre que aumenta, se esconde tu ser.
Huésped sin sombra, por ti comencé a soñar,
Nada dejaré a mi paso,
Nada más que tu belleza.
Lamento que nada es eterno
Y que todos sufrimos al final.
Quebrarás los eternos silencios
En las noches de invierno y verano.
Tal vez un día sin pensarlo una niña serás
Y ese día podremos compartir…
Esta hermosa experiencia de plasmar
Tu bello sonido en un papel.
Huésped sin sombra, por ti comencé a soñar,
Nada dejaré a mi paso,
Nada más que tu belleza.
Lamento que nada es eterno
Y que todos sufrimos al final.
Artista Visual. Fotógrafa. Docente. Multifacética. Real. Propulsora y cuidadora de la Cultura. Asesora cultural.
Charlemos…
2 Comentarios
Tuve la suerte de conocer a Adrián Herrera. Fuí su profesor en el Audio y ahora su amigo. Adrián es una persona excepcional. Psicólogo, Músico e Ingeniero de Grabación. Tres aspectos intimamente relacionados. Me asombra siempre, porque todo lo hace con pasión y lógicamente lo logra con maestría. Siempre debo felicitarlo por cada trabajo que realiza. Es un «grande» de verdad !. Ing. Miguel Gantuz.
Realmente una persona maravillosa! Talentosa y compañera! Tengo el placer de tenerlo en mi vida a él y a su increíble Familia!!
Muchísimos éxitos para Adrian y Mariela!! 🙌