Todos los días piensa antes de dormir
y grita al despertar dentro de algunas paredes que lo sostienen,
los sueños revelan los miedos que lo queman en el día.
Se levanta y el espejo muestra reflejos aun dormidos
queriendo ocultar los dolores de cada mañana.
La soledad lo acompaña para desayunar mentiras
en una sonrisa que no sabe ser falsa.
Todos los días piensa en la casa habitada
y también vacía por tantos sentimientos que faltan,
ella.
Una casa que lo posee y deshidrata de tanto llorar a escondidas.
Hoy antes de dormir se ha quedado sin lágrimas
y busca más en fotos que había escondido
pero el espejo ya no quiero verlo sufrir, se ha roto para no romperlo.
«Escribo para seguir viviendo» – Estudiante de Licenciatura en Letras y profesorado de grado Universitario en Lengua y Literatura – Redes: @_aguirre_micaela_