La verdad es una espina
que no deja caminar a la gente,
que molesta tanto al punto de decidir sacarla
y terminar tirándola para no aceptar su existencia.
La mentira es la salida simple,
que siempre,
aunque lo nieguen,
duele más.
La verdad es una flecha que nos atraviesa
y deja una herida grande,
pero la mentira es una bala que se va enterrando
muy de a poco
doliendo todos los días hasta matarnos.
«Escribo para seguir viviendo» – Estudiante de Licenciatura en Letras y profesorado de grado Universitario en Lengua y Literatura – Redes: @_aguirre_micaela_